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La Victoria de Dios

 ¡MÁS QUE VENCEDORES!



Palabra profética:
"De la mano del Seol los redimiré, los libraré de la muerte. Oh muerte, yo seré tu muerte; y seré tu destrucción, oh Seol; la compasión será escondida de mi vista." (Oseas 13:14 - Antiguo Testamento)

"El que se gloría, gloríese en el Señor", escribió el apóstol Pablo.

Las personas se pueden jactar y gloriar en sus logros personales, es natural. Pero el cristiano, se gloría en que a pesar de sus defectos y derrotas, a pesar de sus pecados, a pesar de su debilidad y mortalidad, tiene un Salvador, uno que venció verdaderamente, el cual le ha dado como regalo de un Padre a su hijo, la victoria que anhela todo ser humano.

Por eso está escrito: "... gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo."

¿De qué victoria está hablando?

Leamos: "Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo." (1 Corintios 15)

A todo el que reconoce que la victoria es solo del Señor Jesús, y que la salvación le pertenece solo a Dios Padre en su Hijo Jesucristo, le es dada la gracia de recibir el gozo y la paz de ser salvo, esto es, vida eterna a todo aquel que cree las buenas nuevas del evangelio, que es la muerte de Cristo por nuestros pecados, y su resurrección victoriosa sobre la muerte.

No se trata pues de nuestros méritos y logros, sino, por el contrario, de los méritos y la victoria del único Digno, el único Justo, el único Santo, el único que puso su cuerpo para cargar la maldición de la Ley, a fin de que nosotros recibiéramos la bendición de la justificación que es por medio de la fe que confía en Él.

Jesucristo es el único Señor de señores y Rey de reyes, el único que puede salvar a toda persona que acude a Él con fe.

¿Sabes qué tenes que hacer para ser salvo y recibir la victoria de Cristo?

La respuesta está puesta de manera exacta y explícita en la Biblia. En la carta a los romanos capitulo 10 el apóstol Pablo escribió:

"... ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.Porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan; porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo."

Amén.

N.M.G.

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