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VOCEROS DEL MUNDO



Este breve escrito busca mostrarte la profunda diferencia entre lo que el mundo considera y teme, y lo que Dios verdaderamente te llama a considerar y temer. Lo que el mundo llama "conspiración" no es lo que verdaderamente conspira contra tu alma. 

El mundo aplaude a los falsos profetas, porque los falsos profetas niegan el único mensaje de salvación dado a los hombres: "La piedra que ustedes, los constructores, rechazaron ahora se ha convertido en la piedra principal”. ¡En ningún otro hay salvación! Dios no ha dado ningún otro nombre bajo el cielo, mediante el cual podamos ser salvos." (Hechos 4:11-12).
No es el mundo el que necesita ser salvo, sino el corazón humano. Por eso el Señor dijo: "Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras." (Mateo 16:26-27)
Por mucho que se jacte el ecologista, él mismo terminará siendo comida de gusanos. Por mucho que se jacta el moralista, él mismo terminará en el mismo lugar que el perverso. Así que, si no hay resurrección de muertos, si el evangelio de Jesucristo no es un hecho cierto, comamos y bebamos porque no habrá más nada al final de la historia. Pero gracias a Dios, tenemos fe, esperanza y amor, como firme testimonio de la obra de Cristo a favor de todos los que confían en que Él, el mismo que murió y resucitó, ha de volver.
Por eso, varios siglos antes de que Él viniera por primera vez al mundo, las sagradas Escrituras judías lo anunciaron,
"Canten al Señor, alaben su nombre;
cada día anuncien las buenas noticias de que él salva.
3 Anuncien sus gloriosas obras entre las naciones;
cuéntenles a todos las cosas asombrosas que él hace.
4 ¡Grande es el Señor! ¡Es el más digno de alabanza!
A él hay que temer por sobre todos los dioses.
5 Los dioses de las otras naciones no son más que ídolos,
¡pero el Señor hizo los cielos!
6 Honor y majestad lo rodean;
fuerza y belleza llenan su santuario.
7 Oh naciones del mundo, reconozcan al Señor;
reconozcan que el Señor es fuerte y glorioso.
8 ¡Den al Señor la gloria que merece!
Lleven ofrendas y entren en sus atrios.
9 Adoren al Señor en todo su santo esplendor;
que toda la tierra tiemble delante de él.
10 Digan a todas las naciones: «¡El Señor reina!».
El mundo permanece firme y no puede ser sacudido.
Él juzgará a todos los pueblos con imparcialidad.
11 ¡Que los cielos se alegren, y la tierra se goce!
¡Que el mar y todo lo que contiene exclamen sus alabanzas!
12 ¡Que los campos y sus cultivos estallen de alegría!
Que los árboles del bosque canten de alegría
13 delante del Señor, ¡porque él viene!
Viene a juzgar la tierra.
Juzgará al mundo con justicia
y a las naciones con su verdad." (Salmo 96)

"Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras."

"He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén. Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso." (Apocalipsis 1:7-8)

Las palabras del Señor no han desaparecido, muy por el contrario, han atravesado los siglos, pueblos y lenguas, para que tengas testimonio del Testigo Fiel y Verdadero, el único que puede salvar y perder, perdonar o condenar, destruir y construir, todo un mundo nuevo. 

Amén.- 
N.M.G. 


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